“NOCHE DE REYES”, de William Shakespeare, en adaptación de Mariano Spléndido, por el Grupo de Teatro La Anunciación. Elenco: Camila Tinto, Luciana Falcón, Juan Coscarelli, Valentina Pizarro, Daniel Vázquez, Leandro Pelassini, Camila Unzué, Guillermo Rossi, Franco Vázquez, Daniela Del Bono, Agustín Fabbi, Mariano Spléndido. Voz cantante: Marcos Ayala. Coreografía: Ivana Rossi. Diseño: Ignacio Rodríguez. Dirección: Belén Spléndido. Pasaje Dardo Rocha, Sala “B”.
Actor, director, poeta, dramaturgo y empresario teatral, William Shakespeare (1564-1616) fue la principal figura del teatro isabelino, y una de las más relevantes de la literatura inglesa. Propietario de los dos principales escenarios londinenses de la época: “The Globe” y “Blackfriars”, salas donde se representaron sus casi 40 obras: piezas de carácter histórico, comedias y tragedias.
“Noche de reyes” (Twelfth Night or What You Will) es la típica comedia de enredos e identidades cambiadas. El melancólico Duque Orsino está enamorado de Olivia, quien está de duelo por su hermano muerto, y lo rechaza de plano. Por su parte, Viola, que acaba de sobrevivir a un naufragio en el que cree haber perdido a Sebastián- su hermano gemelo-, se viste de muchacho y entra al servicio del Duque Orsino bajo el nombre de Cesáreo, ganándose su inmediata confianza. (No está demás recordar que en los tiempos isabelinos los personajes femeninos eran interpretados por jovencitos) Viola se enamora secretamente de su amo, quien la envía a tratar de persuadir a Olivia. La trama se complica aún más cuando Olivia se enamora de Cesáreo. Entretanto, el tío de Olivia, Tobías, se aprovecha de la candidez y del bolsillo del joven Andrés, otro enamorado de Olivia. Ambos, complotados con el bufón y la criada, le gastan una broma pesada a Malvolio, el mayordomo de Olivia, haciéndole cree que su ama está loca por él. Finalmente, todo termina bien: aparece el hermano de Viola, ella recupera su identidad, y cada cual se queda con quien elige.
Shakespeare usa el recurso de los disfraces para suscitar preguntas sobre la identidad humana, y clasificaciones tales como el sexo y la clase social, entidades prefijadas o que fácilmente pueden alterarse mediante un simple cambio de ropas.
No es la primera vez que los jóvenes actores del Grupo “La Anunciación” se le animan a Shakespeare. Ya abordaron con éxito “Mucho ruido y pocas nueces”. Y siempre lo hacen con la audacia, la frescura y el desparpajo que el “Bardo de Avon” hubiera pretendido. Aggiornan el lenguaje, los modismos, el humor, el vestuario, sin descuidar la esencia. Y de este modo lo bajan del pedestal y lo acercan a un público tal vez no familiarizado con los clásicos, tornándolo accesible y muy entretenido.
Mariano Spléndido adaptó el texto, y Belén Spléndido lo dirigió. Resultan particularmente divertidas las escenas protagonizadas por los personajes secundarios: la criada, el bufón, el mayordomo, el tío chupandín y Sir Andrés, el ricachón torpe. Hay quien dice que el propio Shakespeare habla por boca del “bufón loco”, el más sabio y cuerdo de todos.
Siempre es bienvenida la propuesta de desempolvar y reflotar las obras de un autor tan genial y tan vigente, sin dejarse amedrentar por su prestigio. Si el duende de William los espiara entre bambalinas, se alegraría de ver que en pleno siglo XXI, sus comedias siguen haciendo reír como en el XVI.. Lo cual no es poca cosa.