Entrevista a Pato Clara Brusa y Silvia Carrera («Mujeres de Lorca»)

Charlamos con Pato Brusa y Silvia Carrera de «Mujeres de Lorca»

Funciones / Sábado 12 a las 20 y sábado 19 a las 21 Pasaje Dardo Rocha Sala B

Ana Andrea  Angelillo/ Silvia Carrera/ Sergio Arteaga Lobos/ Carolina Torres/ Pato Brusa/ Y músico en vivo Marcos Alejo Erdward

IB: ¿Por qué Lorca, Patricia?

PCB: Porque nos llena de poesía, nos hacen vibrar sus palabras, nos habilita a «jugar» con la emoción, porque ya somos » cómplices «de su decir…. Y sin embargo, después de casi 8 años… lo seguimos descubriendo, lo volvemos a escuchar como la primera vez, siempre hay algo nuevo.

Todo empezó con “Cenando con Lorca”, ¿no es así?

Sí. Era un espectáculo de cenas con escenas (algunas memorables, con menú Lorquiano…, casas particulares devenidas en teatro, bares, » El Yuyal» en nuestros inicios, Maca, centros culturales, Restorantes, 1857, etc). En ese formato, lo que buscábamos adrede era al público; salíamos de frente a buscarlo donde estaba, o a convocarlo con una idea distinta, con una propuesta, con un plus: había » algo más que cenar, tomar, postre y café». También compartíamos una charla, fotos, postre, anécdotas…..Recuerdo la de Margarita, una señora cubana (de la vieja revolución….yo digo, amiga del Che) que tiraba texto con “Las Rositas» a la par…. Aún hoy nos mensajeamos con ella.

Otra vez….entrábamos al resto (luego del plato de entrada, se apagaban las luces, se encendían las velas….) y preguntamos: “¿Donde está mi sombrero?” Y salta una mujer de una mesa (Anita) : “¡Acá!”

Veníamos de noches maravillosas (nuestros EGOS inflados, comentaban…) y nos invitan a un evento raro de poesía….. Pedían una escena. Éramos 5 gatos locos. Y de pronto un señor que quería leer su libro, dice ( mientras actuábamos….) “¿Qué es este mamarracho!?!?” …… A lo cual seguimos, pero al terminar, lloramos de risa …Es más, reímos cada vez que “nos la creemos”.

Y ahora, “Mujeres de Lorca”

“Mujeres de Lorca”, fue una mutación natural…. Fuimos invitados a un festival Lorquiano, adaptamos e incorporamos un músico en vivo….. Todo crece, cambia, se transforma.

Se sumó Federico a nuestras vidas, estaba ahí, con su decir, su pluma y su música, para poder increparlo, pedirle explicaciones, enojarnos, amarlo….. Está ahí. El es quien nos cuenta, nos da vida…..

¿Qué personajes abordan?

Somos Mariana Pineda, Yerma, María, La Vieja, la madre la novia, Rositas, Bernarda, Poncia….y El, que nos acerca al novio, a Victor, a Fernando….

¿En qué Festivales de Teatro participaron?

Participamos este año en el Festival de la Mujer, también en el Pasaje Dardo Rocha, y estaremos este sábado 12 a las 20 hs y el sábado 19 a las 21 hs.

Pronto, saldremos a recorrer Escuelas…..Normal 1 …. Otros públicos, donde  los que se animen, participen con música.

¿Sueñan con llevarla a Granada?

¿Granada?….. Mmmm … no está tan lejos.

Agregó Silvia Carrera:

Lorca sigue tan vivo y vigente y prestamos nuestros cuerpos, y también nuestras almas para teatralizarlos, porque los personajes que elegimos, salvo Mariana Pineda, son contemporáneos. Federico muestra, hasta casi diría que denuncia, la mirada que una sociedad cerrada, hipócrita y violenta tiene de las mujeres. Y lo hace poéticamente, como gran poeta que es. Nosotras, al ponernos el traje de Doña Rosita la soltera, de la Poncia, de Bernarda Alba y sus hijas, de Yerma y la Vieja, de la madre y la novia de Bodas de Sangre, de Mariana Pineda seguimos conmoviéndonos, emocionándonos, sintiendo que nuestra piel es la de ellas cuando sus personajes nos atraviesan.

Nuestra historia se remonta al año 2011. Empezamos en “Yuyal”, en City Bell, un lugar que lamentablemente cerró sus puertas. Su dueño nos ofreció su espacio para actuar. Como era un lugar para comer, el espectáculo se armó teniendo en cuenta la comida. Fue así que luego de una picada, vegetariana, aparecieron las actrices de Doña Rosita. Pato Brusa y Caro Torres. Rosita y su alter ego. Hay una anécdota muy graciosa de esa noche. Rosita entra en escena y pregunta “¿Dónde está mi sombrero?” y desde una mesa se levanta una mujer con un sombrero en la mano y le responde “Acá está”. En realidad el sombrero pertenecía a otra de las actrices que lo había dejado en esa mesa porque estaban ahí sus amigos.

Luego vino el plato principal, un guisito de lentejas, creo, y al levantar los platos apareció la madre – interpretada por Silvia Carrera – de Bodas de Sangre, la escena en que llega a su casa, haciendo callar a las vecinas – Pato Brusa y Carolina Torres – y comienza a hablar de su hijo ya muerto, diciendo que sus lágrimas “vendrán “cuando yo esté sola, de las plantas de mis pies, de mis raíces”. Entonces entra la novia – en la piel de Ana Angelillo – y se entabla entre ambas una lucha feroz, desde ese profundo dolor que las atraviesa ante lo que ya no tiene remedio.

Luego llegan los postres a la mesa y nosotras, las actrices, no sentamos con el público y compartimos cosas dulces con quienes fueron a vernos.

Así comenzamos. Luego fuimos incorporando más escenas, vino nuestro amado Federico García Lorca – el queridísimo Sergio Arteaga Lobos. Al ser el único varón, además de ser Federico, es Víctor en Yerma, Fernando en Mariana Pineda y el Novio en Bodas de Sangre. Y también llegó un breve monólogo, escrito por una de nosotras, de la Poncia ante una Bernarda Alba inmóvil y silenciosa.

También quisimos tener música, primero para tocar la canción de Mariana Pineda cuando la llevan al cadalso. Esa música fue escrita por Federico, quién también le puso letra. En varias oportunidades la cantaron Malena y Ema, hija y sobrina de Carolina Torres. Realmente conmovedora la interpretación de ellas.