La versión teatral de “Fiddler on the roof”, basada en la novela homónima del escritor ruso Sholem Aleijen, se estrenó en Broadway en 1964. Recordamos nítidamente la versión local de “El violinsta en el tejado” (1969), protagonizada por Raúl Rossi y Paulina Singerman, en el Teatro Astral, con producción de Alejandro Romay. Hoy, en ese mismísimo teatro de la familia Gallo, con sus jóvenes y extraordinariamente vitales 80 años, Raúl Lavié se da el gustazo de vestir la piel del entrañable lechero “Tevye”, el patriarca de “Anatevka”, una aldea de la Rusia zarista de comienzos del siglo XX, que los judíos son obligados a abandonar, víctimas una vez más de esta lacerante persecución histórica.
Al finalizar los encendidos aplausos y ovaciones de la función de Prensa, el extraordinario intérprete “todo terreno” confiesa, emocionado que éste es un sueño largamente acariciado, ahora cumplido. Y más que cumplido. Lavié sigue cantando con la misma potencia y expresividad de siempre. Compone un personaje querible, rico en matices, que le demanda una enorme entrega vocal, emocional y física. Se lo ve sólido, seguro, pleno, pícaro, dueño de la escena: indudablemente, su lugar en el mundo.
Raúl Lavié no está solo. El nutrido y versátil elenco que lo acompaña brilla a la par. Julia Calvo, “Golde”, esposa de Tevye, formidable. Adriana Aizemberg, “Yente”, la casamentera del pueblo, impecable. Omar Calicchio, el carnicero “Lazar Wolf”, adorable. Dan Breitman, un graciosísimo “Motel”, que arranca risas con su sola presencia. Miguel Habud, en la piel del “Rabino” un tanto chanta. Y los jóvenes Patricio Arellano (“Perchik”), Florencia Otero (“Hodel”), Germán Tripel (“Fyedka”), Manuela del Campo (“Java”), Diego Bros (“Alguacil”), Andrea Lovera (“Fruma Sarah”/ “Shandel”), Eluney Zalazar (“Abuela Tzeitel” / “Rivka”), Julia Tozzi (“Shprintze”), Damián Iglesias (“Avram”), Augusto Fraga (“Mendel”), Alejandro Dambrosio (“Morcha”), Pedro Frías (“Nahum”), Andrés Rosso (“Igor”), Diego Martín (“Yussef”), Laila Maugeri (“Esther”), Emiliano Pi (“Sasha”): derroche de talento. Todos cantan, bailan y actúan con absoluta solvencia, muy experimentados en el género.
Gustavo Zajac, audaz capitán de esta nave insignia, responsable de la traducción y adaptación del libro original (de Joseph Stein, Jerry Bock y Sheldon Harnick), la coreografía y la dirección general, asume un gran riesgo con esta ambiciosa propuesta, del que sale más que airoso, junto a Julieta Kalik productora general. Todo luce aceitado, prolijo, coordinado, bello. El cuerpo de baile deslumbra por su destreza y gracia. La orquesta en vivo está integrada por Matías Tchicourel (clarinete), Luis Daniel Juárez (trompeta), Iván Exequiel Barrios (trombón), Gonzalo Pérez Terranova (percusión), Agustín Gallo Pinedo (teclados), Nicolás Ernesto Muñoz (cello), Flavio Ariel Romero (contrabajo), bajo la dirección de Mateo Rodó, quien realza y subraya los contrastantes climas de esta icónica pieza. Destacamos la vital participación del violinista Pablo Hopenhayn. La ajustada y precisa dirección vocal está a cargo de Sebastián Mazzoni.
“El violinista en el tejado”, otra propuesta imperdible para los amantes de la comedia musical, se presenta en el Teatro Astral, Avda Corrientes 1639 los miércoles, jueves y viernes a las 20.30 hs; los sábados a las 19.30 y 22.30; los domingos a las 20 hs.