¡Chicas! ¡Conecten sus neuronas! Les propongo un “brainstorming”.
¿Es un trago nuevo, Pochi? ¿Con o sin alcohol?
¡Tantos años de clases de inglés tirados a la basura, Martita! Brainstorming, tormenta de cerebros, una lluvia de ideas.
¿Para?
Para abrir nuestro propio unicornio.
¿Vivo? ¡La estás copiando a la Su! ¿O estás buscando al unicornio azul de Silvio Rodríguez?
¡No entendés nada, Martita! Hablo de abrir nuestra propia empresa, nuestro emprendimiento, nuestra pyme.
¿Haciendo qué?
Aprovechemos la volada para imprimir remeras y musculosas, con las bolufrases emblemáticas de los tiempos que corren.
Dános un ejemplo, Pochi.
Yo anoté algunas referidas al ex Presidente que recién ahora está cumpliendo su cuarentena efectiva. A ver qué les parecen. “Yo NO me encamé con Alberto”.
¡Qué jugada! ¿Será cierto?
Otra más libidinosa: “Decime algo lindo”.
¿Puedo yo? “Colarse no es delito”.
¡Bien ahí! ¡Vamos, vamos! ¡Que no decaiga!
¡Tengo una! “Los argentinos venimos de los barcos.”
Me toca a mí: “Te amo pero nunca más te voy a votar”.
Es un poco larga. Apelo a vuestra capacidad de síntesis, amigas.
Sacando a Alverso y a Tamara, ¿vale citar a otros?
¡Sí, claro! Todo lo que resuene.
Ahí va: “Me recibí sin haber leído un solo libro”.
Del mismo autor: “No sé a quién se le pudió ocurrir”.
Me vino a la memoria una de Luisito Barrionuevo.
Dejáme adivinar: “Tenemos que dejar de robar por lo menos dos años”.
¡Muy larga! Entraría en un remerón oversize. O en un pareo.
Tengo una del Cabezón, marido de la manzanera: “Estoy condenada al éxito”.
¿Se acuerdan del “Me quiero ir” de Lorenzino? Hay más de uno que lo está pensando.
Inspirada en una del Gato: “¡No me inundo más!”
¿Cómo olvidar la de la jermu de Alperovich? “Yo tengo 10 mansiones, no una, y estoy acá.”
Mirá vos. Tantas mansiones y el dorima termina en cana por abuso sexual. ¡Qué ironía!
¿Alguna de ustedes me puede explicar por qué Alverso tenía tanto arrastre? Guapo, lo que se dice guapo, no es. Y dicen las malas lenguas que coleccionaba amantes jóvenes.
Ya te expliqué, Martita. El Poder es una droga afrodisíaca, erotizante. Embellece al más fiero. Y ya sabemos que billetera mata galán. No falla jamás.
Volviendo a tu emprendimiento, Pochi. ¿Vos creés que alguien compraría esas prendas que pensás fabricar? ¿Será buen negocio?
Me tiraría un lance. También podrían tener imágenes: el Peluca dándole un pico a Yuyito; Karina abrazando a Thor, el nuevo rope de la Rosada; el vocero ninguneando a Maradona.
Adorni tiene ínfulas de estandapero, y nadie le dice que no causa gracia. Es soporífero.
Bueno, les dejo tarea para el hogar. Sigan proponiendo, que todavía estamos a tiempo.
La última, Pochi, para un levante descarado: “Seguíme; no te voy a defraudar”. ¡Chin, chin!