Chicas, ¿qué me cuentan del destape del “Bailando”?
A mí no me asombra. La próxima etapa es que exhiban los chinchulines.
A ver, a ver: ¿ustedes saben qué quiere decir “Showmatch”? “Show” es mostrar, y “match” encuentro entre adversarios. En el programa la gente se muestra y se agarran de las mechas, de modo que hacen honor a su nombre.
Díganme: Qué es más impúdico? Esas peleas berretas, guionadas entre jurados y con los participantes, o que los bailarines ventilen sus partes pudendas?
Si las cámaras no hicieran esas tomas ginecológicas, no sería tan chocante.
Está todo fríamente calculado, Mecha. El Jefe se hace el vergonzoso y timorato, pero debe dar precisas instrucciones al respecto. No come vidrio el Cabezón.
Los que tienen cable, pueden dar de baja los canales codificados. Total, con ver a los concursantes en tarlipes, basta y sobra para inspirarse. Menos gastos.
Dicen que al canal le van a cobrar una multa de 4 palitos por el primer plano de la “nena” de Cinthia Fernández.
¿La nena? No sabía que Miss Hilo Dental ya era mamá. Tan jovencita.
¡No, nena! La “nena” es el apelativo de la Pradón a su tesoro más preciado.
¡Otra que tesoro más preciado! Si tenía más visitas que You Tube
En la tele los límites se han ido corriendo a una velocidad pasmosa..
Sí, y el buen gusto brilla por su ausencia. La vulgaridad ganó por goleada.
Es que no entienden que lo sugerido es mucho más erotizante que lo explícito.
No estoy tan segura, Coca. Si no, mirá los posters de las gomerías. A los tipos los calienta la carne argentina bien a la vista. Todo sobre el mostrador. En pelo
Por suerte, hay mucho más que este outlet de cuarta. ¿Vieron la entrega de los premios Konex? Tenemos unos artistas de la hostia. ¡Cuánto talento!
Darín se llevó todo. ¡Capo! Y encima, no se la cree. Se considera sobrevaluado.
A mí no me parece mal que haya tele para todos los gustos. Si Showmatch mide como mide, es señal que el chabón dio en la tecla popular y masiva. ¡Chapeau!
No es tan así, Negri. Al gusto también se lo puede formar, apuntando más alto.
Es que tal vez la misma gente que lo va a escuchar a Barenboim o a Zubin Mehta en la 9 de julio, es la que prende la tele y consume chatarra sin filtro.
Hay cosas de nuestras “celebrities” autóctonas que son realmente inexplicables. La otra noche, cuando Susana le hacía la esperada entrevista a Juanita Viale, como medía bien, le dieron 4 minutos más, y la rubia se abatató y no supo cómo seguir. ¿Pueden creerlo, con tantos años de experiencia?
Claro, porque no las tenía escritas. Es incapaz de improvisar sobre la marcha.
A “Su” se le perdona cualquier cosa, con la débil excusa de que tiene “ángel”.
El único mensaje claro de nuestra tele es que las chicas no necesitan estudiar, ni cultivar el intelecto, ni esforzarse y trabajar para progresar en la vida. Con matarse en el gym, pelar lomo y armar bardo, basta y sobra. Sin olvidarse de subir algunas fotos íntimas a la web, obvio. Con ser mujer objeto alcanza.
Acá entre nos, a mí me encantaría ser considerada “mujer objeto”, pero a esta altura, soy más descolado mueble viejo. “Sola, fané y descangayada…”
Ojo que a esas chiruzas también se les va a caer la estantería tarde o temprano.
Y para ese entonces, nosotras ya estaremos varios metros bajo tierra. No vale.
Todavía estamos a tiempo. Miren si no a la Duquesa de Alba. Se enganchó a un pebete de 60. ¡Idola! Un brindis por la aristócrata rebelde: ¡Chin, chin!