¡Videollamada en marcha, amigas!
¿Todas conectadas? ¿Cómo va?
Yo por primera vez les cuento que
estoy contenta de estar encerrada.
¿Por? ¿Se te pasó la
claustrofobia, Lidia?
Maso. Desde que me enteré que
están liberando sopres a troche y moche, me alegro de estar en
casita sana y salva, lejos de los cacos.
No todas son malas noticias,
chicas. Se postergó el arranque del “Bailando 2020”, por
ejemplo. Y vaya a saber si se hace. Se suspendió “Casados con
hijos” en teatro. Tampoco se sabe si vuelven las “Separadas”.
O sea, no perdemos nada.
¡No seas jodida, Mecha! Eso
perjudica a muchos laburantes.
Es cierto, pero – aunque suene
egoísta- muchos de nosotros, más que agradecidos.
¿Y la Reina Madre volverá?
¿La del Reino Unido? ¿Vieron
que habló por cuarta vez en 68 años? Parca la señora.
Yo no usaría esa palabra en los
tiempos que corren. No seas mufa. Además, preguntaba por la Chiqui,
nuestra Queen autóctona, no la posta.
¡Ah! Me parece que la nieta ya le
serruchó el piso. Está mucho más suelta, ¿vieron?
Pero Andy con su PH le sigue
ganando por varias cabezas.
Y eso que mostró su costado
machirulo Kusnetzoff, con las preguntas que le hizo a Noelia Marzol.
Y los varones invitados, bastante onanistas, por decirlo finamente.
Un papelón.
¡Qué plomazo los programas donde
hay más pantallas que gente de carne y hueso! El “delay” es
insoportable. Cero ritmo y mucho cri, cri … Baches a rolete.
Tenés razón. ¿Alguien se clavó
con ese programa ómnibus del domingo pasado que trasmitieron todos
los canales de aire a la vez?
La causa era buena, Zule. Juntaban
guita para la Cruz Roja. No seas jodida.
Cierto, pero eso no quita que
fuera un moplo indisimulable. Acartonado, lento, reiterativo. Cada
cinco minutos los conductores variopintos nos mandaban a lavar las
manos. Me tienen harta con el recordatorio. ¡Ya entendí,
muchachos!
A Casero se le soltó la chaveta
otra vez y pidió en redes que la gente no donara ni un centavo.
Todo porque fue una iniciativa de la Primera Dama. Derrapa seguido
Alfredito.
A otro que se le volvió a saltar
la térmica es a Julián Weich. Se la volvió a agarrar con la
Patria Panelista.
Y tiene razón. A mí también me
hartan los opinólogos sabelotodos, especialistas en nada.
Igual ahora de lo único que se
habla es del maldito virus. Más que informados estamos infoxicados.
Es una espesa cortina de humo que no nos deja ver el resto de lo que
está pasando.
Volviendo a “Showmatch”, las
parejas iban a bailar sin tocarse, ¿sabían?
¿Sin tocarse? ¿Cómo? ¿En
espejo? Y sin público, supongo. Ahorráme el disgusto, please.
¿Tinelli volvió de su refugio en
el sur?
No. Creo que sigue en su mansión
de ESquel. 850 metros cuadrados, 4 dormitorios en suite, otras
tantas habitaciones y toilettes, bodega, casa de huéspedes., y la
mar en coche. Hasta capilla tiene el cabezón, ¿pueden creer? ¡Qué
vivo! Así cualquiera aguanta la cuarentena.
¿Vieron que se prolonga la cosa,
no? Nosotras, las mayorcitas, seguiremos guardadas.
Es para “achatar la curva” Yo
las perdí hace rato., si es que alguna vez las tuve.
No hay mal que dure cien años ni
cuerpo que lo resista. Siempre que llovió paró. No hay mal que por
bien no venga. Se me acabaron los dichos buena onda.
Les debo los huevos, chicas. Bien
caseritos. ¡Miren qué bien me salieron!
¡Ni los muestres, por el amor de
Dios, que soy capaz de romper la pantalla para agarrarlos!
Nunca nos olvidaremos de estas
Pascuas, eso seguro.
A seguro se lo llevaron preso, y a
los presos los soltaron. Sobre llovido, mojado. Brindemos con
cicuta: ¡Chin, chin!