Marga, estacionaste tu cascajo casi en la esquina. Estás en infracción, querida.
¿Qué sos? ¿Fan del Jefe de Gobierno? ¿Te volviste buchona, Yolanda?
¿Por qué? ¿No te parece bien que los vecinos denuncien faltas de tránsito?
¡Por supuesto que no! Se empieza con eso, y vaya a saber dónde se termina.
Marga tiene razón, Yoli. No es bueno incentivar la alcahuetería. Después te van a pedir que denuncies a los vecinos que no barren la vereda, los que manguerean el auto, los que tienen los frentes descascarados …
Y poco a poco, se van a meter con tu intimidad. Te puede denunciar alguien que te vea franeleando o zaguaneando, por ejemplo.
¡Qué antigüedad, Emma! Ya no se estila. Ahora se va derecho a los bifes. Ni zaguanes quedan. Con la falta de espacio que hay, se han vuelto kioscos.
O capaz que te ven salir de un telo y te escrachan. De envidia, nomás.
¡Claro! La próxima medida puede ser una Comisión de Moralidad que aliente a los vecinos a denunciarte si ven que tenés “hilos dentales” colgados de la soga.
No exageren. El tipo quiere poner un poco de orden. Eso es todo.
Y bueno. Para eso que use a la Policía Metropolitana
Hay que educar, no buchonear, Yoli. Si no, vamos a terminar agarrándonos de las mechas como las vedetongas, todos contra todos, dándonos la cana.
Le podríamos pedir a todos los argentinos que fueron a Sudáfrica, que traigan sus “vuvuzelas” para cornetear infractores. Son más estruendosas y llaman más la atención que los silbatos.
Chicas, ¿no están hartas de las hordas de comentaristas deportivos que viajaron? Como están horas al cuete entre partido y partido, y tienen que justificar el gasto, se lo pasan haciendo “notas de color” berretas, rellenando con cada pavada, que da calambre.
Cierto. Yo ya vi a varios bailando el Waka-Waka, entrevistando a individuos que no pasarían el test de alcoholemia, champurreando un inglés tarzanesco, babeándose con cuanta moza y promotora se les cruza, dándole de comer a los elefantes, a los monos, a las jirafas. ¡Qué regresión!
Peor los que hacen diagnósticos y pronósticos de todo tipo, expertos en futurología, dando cátedra, como si fueran los Einsteins del balonpié. Hablan de fútbol como si estuvieran explicando la estructura del átomo. ¡Más pesados!
Y bueno, Nancy. Dejálos disfrutar de sus 15 minutos de fama.
Hablando de fama, ¿vieron que la Alfano se abuenó de golpe? Les otorgó su bendición a la pareja de tortolitos, Alé-Escudero.
¿Su bendición? ¿Pero cómo? ¿Ahora resulta que Grace es cura?
No. No tiene cura, que es muy distinto.
Ella y el chocolatinero viven en una montaña rusa emocional. Elogian, despotrican; te aman, te aborrecen; te sepultan, te salvan. Impredecibles.
Así estamos todo con el Mundial. Por ahora, por suerte, en la cresta de la ola.
Es para creer en la ley del karma. ¿Saben que el DT de Corea jugó en el 86 y lo marcó a Diego cuerpo a cuerpo, a pura patada? Ahora le tocó el trago amargo.
¿Vieron que Maradona les prohibió a Las Electrostars que se acerquen a los jugadores? Tiene miedo que los tienten con la fruta prohibida.
Pero esas frutas son de plástico, como las que tiene mi tía de centro de mesa.
No soy muy futbolera, pero brindo por la albiceleste en su día. ¡Chin, chin!