por Irene Bianchi
- ¿Vieron cómo se ha puesto de moda La Plata para filmar? ¡Qué buena onda!
- No es para menos. Tenemos locaciones de sobra: el Hipódromo, el Pasaje Dardo Rocha, la Estación de Trenes, Meridiano V, la Casa Curutchet, el barrio de Tolosa.
- ¡Ah! Ahora entiendo. Esta semana se debe haber filmado una secuencia de “La Guerra de las Galaxias” en la Avenida 7, por eso hubo tantos cortes y la calle quedó con ese aspecto apocalíptico. ¡Qué buena ambientación!
- No, Chola. En todo caso, esa peli podría llamarse “El Sitio de Silver City”.
- La Ciudad Autónoma de Buenos Aires no se quedó atrás. Ahí se está rodando “Picnic estudiantil”, en las principales avenidas de la metrópolis. Los automovilistas, chochos. Y los comerciantes, ni les cuento.
- ¡Cuánto arte! ¡Cuánta cultura! Así da gusto. Todo es tan estimulante y edificante. Da gusto.
- Tanto se tiene en cuenta entretener a la gente, que los miércoles –a falta de Tinelli- ¡se arma un tole tole picante en las sesiones del Congreso! ¡Otra que las peleas de vedetongas!
- Hannibal es el adalid de la ciencia ficción. Un capo. Tiene un discurso tan convincente, que- después de escucharlo- yo creo estar viviendo en el paraíso terrenal.
- Debe haber leído “El Secreto”, ese famoso libro de autoayuda de Rhonda Byrne, que te enseña a formular decretos metafísicos. Si afirmás algo, con absoluta convicción, se te cumple. Responde a la Ley de Atracción. No falla jamás, como los cierres Linsa, ¿se acuerdan?
- ¡Ah, claro! Por eso insisten con lo de: “No hay inseguridad”, “No hay inflación”, “No hay pobreza”. Es una estrategia para lograrlo, no una negación de la realidad.
- Justamente. Uno se convierte en lo que piensa. Lo semejante atrae a lo semejante.
- Yo leí que uno es lo que come, no lo que piensa. Ahora estoy confundida.
- También, Nancy. Por eso hay tanta cabeza chatarra. La comida rápida te atrofia las neuronas. Te empasta los circuitos cerebrales.
- ¿Vos decís que el Tío Sam nos sigue dominando a través de las hamburgueserías?
- Sí, y del pochoclo, la goma de mascar y los perros calientes.
- Yo nunca sé cuándo hablás en serio, o cuando me estás cachando.
- A todos nos están cachando, Negrita. No sos la única. Conformáte.
- A mí me gusta que me doren la píldora, ¿qué quieren que les diga?
- Así te va, Chola. De mal en peor.
- Es que tanta sobredosis de verdad me bajonea. Prefiero que me mientan un poquito.
- Entonces naciste en el lugar adecuado. Buen karma.
- Si por lo menos fueran pintorescos, como el tano Berlusconi, que aconseja a las ragazzas lindas que se casen con millonarios.
- ¿La Vanucci habrá tomado un curso con Silvio? Le hace caso al pie de la letra.
- Propongo un brindis por la peli más taquillera de los últimos tiempos: “Odisea Argentina 2010”. Próximamente … No, mejor: “Ya, en esta sala.” ¡Chin, chin!